Buenas prácticas

Una pequeña organización de asistencia social a la infancia descubrió que los trabajadores de 50 años o más faltaban de forma regular al trabajo o estaban de baja por enfermedad. En un intento de conservar a estos experimentados trabajadores se implementó un proyecto piloto para rediseñar sus tareas a través de un enfoque participativo.

Una gran mina de carbón ha identificado tasas crecientes de absentismo por enfermedad y de entre sus trabajadores. La empresa implantó un programa para reducir el absentismo y la incidencia de este tipo de trastornos a través de la prevención. También quiso mejorar la salud de los trabajadores a través de actividades de concienciación y promoción de la salud.

Una pequeña empresa de servicios de asistencia social cuenta con trabajadoras exclusivamente femeninas, que sufren de un alto nivel de estrés y burnout por las altas demandas emocionales del trabajo. Necesitaban encontrar la manera de mejorar las condiciones de trabajo para reducir la rotación de personal.

Una empresa de servicios aeroportuarios cuenta con 500 empleados, de los cuales más de la mitad hacen turnos. Recientemente se ha identificado un problema creciente con el absentismo por enfermedad y la laboral. Se inició un programa para mejorar la salud en general y la conciliación de los trabajadores a través de un enfoque basado en todas las etapas de la vida.

Una gran multinacional implantó un programa de promoción de la salud para crear un entorno laboral más saludable para todas las edades. Se reconoció que los trabajadores están motivados por distintas cosas en cada etapa de su vida y se diseñó un programa que tuviera en cuenta esa diversidad.

Una cementera emplea a más de 200 personas, un tercio de las cuales tiene más de 50 años. Dado que los trabajadores de más edad tienen más riesgo de accidente laboral, la empresa quiso centrarse en hacer que el entorno laboral fuera lo más saludable y seguro posible.